Lo que comenzó siendo algo así como una experiencia desastrosa para mi mente (por diferentes motivos), ha terminado siendo (al menos hasta ahora) lo más enriquecedor que me ha pasado en la vida. Como ya me han dicho más de una vez, ayer la última sin ir más lejos: “Es que nosotros nos conocemos desde que teníamos 0 años, y tenemos que ver que no todo el mundo va a ser igual de comprensivo y permisivo que lo son tus amigos de toda la vida.”
A. dixit. Y tiene toda la razón del mundo. Y le doy gracias a Suecia por ser (además de uno de mis destinos favoritos) el lugar en el que me he dado cuenta de más cosas en cerca de 5 meses, y a mi par de ovarios por dejar atrás una situación lamentable por la que estaba pasando en el momento en el que decidí registrare en la SSSB, que en Bilbao durante los anteriores 20 años. Nunca es tarde, dicen.
TACK SA MYCKET, SVERIGE 
